Menos de un mes desde que sufriese una cornada en la quinta corrida clasificatoria, nos comenta la puesta a punto para volver a los ruedos tras largas sesiones de fisioterapia y una lesión todavía existente en la rodilla
El torero extremeño, ya de vuelta en Madrid tras pasar unos días de recuperación en su casa, atiende al teléfono entre sesión y sesión de fisioterapia. El pasado 26 de marzo, en Cercedilla, resultó herido por un toro de Quintas cuando toreaba al natural bajo la puerta grande.
Tras pasar a la enfermería, el parte médico rezaba una cornada de dos trayectorias en la pierna derecha y una lesión en la rodilla izquierda con fractura de la meseta tibial. Ambas lesiones evolucionan favorablemente “la cornada me ha dado menos guerra que la fractura”. Lo principal en estos días ha sido trabajar el esguince de ligamento y fortalecer los músculos “porque la fractura por mucho que quieras es imposible acortar los plazos”.
Aunque solo pudiese torear un toro, fueron muchos aficionados a través de las redes sociales y profesionales de la comunicación en los portales, quienes valoraron positivamente la actitud y las cualidades que demostró Fermín. El propio torero lo describe como “momentos bonitos, ese reconocimiento y el cariño de la afición y compañeros profesionales, me ha ayudado mucho en estos momentos de recuperación”. En la plaza “queda mucho por enseñar todo lo que tengo dentro”.
Tan solo lleva 4 corridas de toros desde que tomase la alternativa el pasado mes de julio de 2022, pero se pudo comprobar el poso y el sitio cogidos durante el invierno en el campo. Tal y como está el campo actualmente es difícil sacar vacas o toros para torear a puerta cerrada, lo importante es aprovechar las oportunidades. Hasta Cercedilla “había hecho menos campos que otros años y había toreado una corrida de toros en Coria” y añade, “cuando uno está mentalizado y tiene la madurez que el tiempo te va dando, afrontas los compromisos de otra forma”.
La Copa Chenel “era lo que tenía, sabía que mi temporada dependía de esa participación”. Se quedó con el sabor amargo de solo torear un toro, pero está agradecido a la oportunidad recibida. Es un certamen “al que le doy la enhorabuena. Es un proyecto muy bonito que a toreros en mi situación les ayuda muchísimo a darse a conocer y entre todos tenemos que ayudar a que siga creciendo”, añade. El objetivo principal “no era quedarme solo en un festejo, yo estaba mentalizado para llegar a la final y ganarla”.
Este sábado vuelve a los ruedos, los médicos le habían dicho que mínimo 2 meses y medio de recuperación, pero ya saben cómo son los toreros, los plazos de recuperación los acortan “y por mi cuenta he decidido aceptar el compromiso del sábado”. La corrida, a celebrar en la localidad extremeña de Talayuela, reunirá a Diego Ventura, Antonio Ferrera, su padrino de alternativa, y Alejandro Fermín. Tal y como el torero comenta, “para mi cualquier corrida de toros suma y la afronto con mucha ilusión”. Lo que más le ayuda para afrontar este compromiso “es saber que tengo la oportunidad de vestirme de luces y eso es lo que más me llena”.