
Olsina, Molina y Burdiel se pasaron por el programa de Sixto Naranjo para hablar de sus compromisos en las semifinales de la Copa Chenel
La recta final de la fase clasificatoria de la Copa Chenel ya está en marcha, y los toreros afinan su preparación para sus próximos compromisos. Olsina actuará en Navas del Rey el 14 de junio, ante toros de Aurelio Hernando y Montalvo. Por su parte, Álvaro Burdiel y Jorge Molina harán el paseíllo en Moralzarzal, lidiando ejemplares de El Estoque y José Enrique Fraile de Valdefresno.
Olsina llega con la moral alta tras su reciente triunfo en Alès, donde cortó tres orejas: “Me ha dado mucha moral y también me da fuerzas para seguir trabajando esta semana antes de la Copa”. En cuanto al compromiso de Navas, apunta: “Nunca he tenido la oportunidad de torear esos toros y somos tres hombres distintos en el cartel. Va a ser una tarde bonita”.
Por su parte, Álvaro Burdiel comenta que la recuperación de su cogida ha sido más lenta de lo esperado, pero ya está casi al cien por cien para preparar su próxima actuación en Moralzarzal, donde lidiará ganado de El Estoque y José Enrique Fraile de Valdefresno. “La lesión parecía más grave, pero estoy trabajando la paciencia y la recuperación, y me ilusiona mucho la fecha y el cartel. Sé que será una tarde especial”, explica.
Sobre la presión que conlleva la puntuación para clasificarse en la Copa Chenel, Burdiel reconoce: “Bajo mi punto de vista sí que lo tienes en la cabeza. Los días previos sobre todo, pero luego en la dinámica de la corrida se te olvida por completo. Aun así, uno sabe lo que se está jugando y que cualquier mínimo detalle suma una décima más o menos.”
«El año pasado para mí fue muy complicado, los pensamientos que tenía de alternativa se fueron al garete»
Jorge Molina reconoce que la temporada pasada fue un año complicado en su carrera, donde sintió que sus aspiraciones de tomar la alternativa se vieron frenadas. “El año pasado para mí fue muy complicado, los pensamientos que tenía de alternativa se fueron al garete. No tenía sitio dónde tomar la alternativa y, después de haber toreado en todas las ferias de novilladas, me quedé en tierra de nadie. Fue una temporada donde vi lo difícil que es el toreo, que un año te puede venir todo rodado y al año siguiente ves que nadie te regala nada.”
Sin embargo, Molina ha sabido aprender de esas experiencias, adaptándose mentalmente para encarar esta nueva etapa. Sobre su estilo, señala: “Sigo buscando la misma línea: entrega máxima y mostrar un concepto clásico intentando evolucionar cada día.” Para él, la Copa Chenel ha sido un reto que le ha ayudado a ir perfilando su identidad como torero, con el ánimo de seguir creciendo en cada cita.
Todos coinciden en el valor añadido que supone torear en la Copa Chenel, tanto por la presión como por la implicación del público. “Se nota el positivismo, el público va con ganas y eso te ayuda a disfrutar toreando”, dice Olsina. Burdiel remata: “Saben quién eres y van a verte porque tienen interés. Eso motiva”.